Edición N° 402 - Octubre 2016

El pasto en nuestras casas

 

 

Muchas veces nos preguntamos cuál es el mejor pasto para nuestras casas y en esta edición, el arquitecto Juan Francisco, Pancho, Crosa Yelsi -consultor de áreas verdes,  paisajismo, campos deportivos, piscinas, fuentes y cascadas, manejo de aguas, pozos artesianos y sistemas de riego- propone diferentes tipos a elección. Dice que “pisar descalzos (el pasto) produce una sensación única que nos conecta a tierra y descarga los humores del trajín diario”.

Ya en primavera y con un clima apropiado para disfrutar de nuestros patios, quizás nos demos cuenta de los estragos que el invierno dejó en el césped.

El prado es el área verde que ocupa generalmente, la mayor superficie de nuestros jardines. Es una alfombra verde acogedora donde podemos desarrollar nuestra vida de contacto con lo vegetal. Pisarlo descalzos produce una sensación única que nos conecta a tierra y descarga los humores del trajín diario. Esto, siempre que no tenga piedras, cascotes o espinas que lastimen  los pies.

Muchas veces nos preguntamos cuál es el mejor pasto para nuestras casas…

Hay varios candidatos. Tenemos el esmeralda, hoy muy de moda; el brasilero, de hojas anchas; el brasilerito, su hermano menor; el siempre verde, su primo; los fortachones; pasto clave; y cavajú.

Llegué a la conclusión que todos, siempre que se cumplan algunas condiciones como que sean bien verdes, de superficie pareja, agradable a nuestros sentidos. ¡Desprolijidades afuera! Sin zonas peladas y sin yuyos.

Encontré cinco condiciones para obtener una buena pradera: una buena tierra, con nutrientes o abono suficiente para alimentar las raíces y fomentar un vigoroso crecimiento.

¡Mucho sol! Indispensable requisito. Sin sol no hay césped bueno, a veces   solo un pasto ralo y lindo viendo  desde lejos.

¡Buen riego! El agua diluye los alimentos sólidos del suelo y penetra por las raíces a las plantas. En verano, una vez por día, el exceso también es perjudicial. En invierno, digamos una vez a la semana. Bendito sea el sistema automático de riego. Bueno, bonito y no tan barato, pero efectivo y con excelente rédito.

¡No al perro! Que nuestras mascotas vivan en su propio redil.  En realidad no solo al perro sino que al pasto no le gustan pisoteos en exceso, el fútbol diario, las gallinas ni otros elementos que le ataque física o químicamente, con pipí por ejemplo. Racionalicemos su presencia en esta área.

Por último, mucho corte. Y no por ello menos importante. He visto muchos prados que se formaron con solo cortar y cortar. Tal parece que la poda favorece al pasto y desalienta a los yuyos. O los dejan tan bajitos que se confunden con las hojas del césped y ya no importa otra cosa.

 

Siembra en plantines

Esta temporada, inicios de la primavera, es  apropiadísimo para iniciar labores de siembra. Los métodos son varios y cada uno tiene sus defensores y momentos. Estos son: en panes o tepes, en plantitas, en mechones, en semilla. En otras latitudes está difundida la plantación en rollos, como si fuera alfombra.

Sembrar en plantitas, en esta época suele dar excelentes resultados.

El procedimiento incluye la preparación del terreno, regularizándolo y ubicándolo en los niveles que convengan a la funcionalidad y el paisaje.

Desparrame suficiente abono natural, preferiblemente humus de lombriz mezclándolo con la tierra del lugar bien removida y aireada.

A continuación, esparza una buena capa  de arena lavada para favorecer el enraizamiento, hasta lograr una superficie bien lisa y agradable, parecida a las de las playas del mar.

Consiga mudas o plantines de la especie escogida.  Se venden embolsadas en los viveros.

Puede adquirir también pasto en panes, lo que desmenuzándolo esparza el terrón descubriendo las raíces que se plantarán en el terreno. Rinde bien en beneficio de la economía. Plántelos en cuadrícula de 10 x10 cm y deje  que la tierra ejerza su maravillosa tarea de germinación.

En poco tiempo, quizás 30 días, ya verá  surgir un hermoso prado que cada día se tornará  más bello y amigable.

Como siempre, para compartir pensamientos, experiencias y opiniones, escríbanme a mi wasap 0981 417466, o a los correos electrónicos: redaccion@mandua.com.py  y/ o mauri@mandua.com.py.

 

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