Edición N° 425 - Septiembre 2018

Fiuna: biblioteca y laboratorios están saturados y falta infraestructura

Reproducimos el artículo publicado el 20 de agosto en el diario Ultima Hora por considerarlo de sumo interés para el sector de la construcción.

El edificio donde funciona la biblioteca de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (Fiuna), en el campus de San Lorenzo, fue creada a inicios de los 90 para “menos de la mitad” de la población estudiantil que hoy registra esa casa de estudios.

Además de no dar abasto, tampoco está debidamente informatizada: carece de bloques diferenciados para todo tipo de estudios y de una robusta conexión a internet que permita usar el sistema de videoconferencia para llevar a cabo charlas con egresados de la institución que cursan posgrados o doctorados, por citar, en el exterior.

“Necesitamos más espacio físico para albergar a la cantidad de estudiantes que tenemos. Esto se llena y prácticamente tenemos disponibles 200 puestos de lectura y mínimamente necesitamos 600”, refiere el licenciado Alberto Insfrán, jefe de biblioteca.

Como en un mismo salón se comparten el archivo bibliográfico y la sala de lectura, precisan de varios sectores. “Necesitamos un sector exclusivo para libros, otro para tesis, planos; otro para investigación -que no tenemos- y una sala de estudio en equipo y otra sala silenciosa”, enumera.

Todo eso forma parte de una biblioteca moderna que se prevé implementar mediante un proyecto. Para ello, se precisan alrededor de 10.000 millones de guaraníes. Pero, ante los recortes sistemáticos al presupuesto de las universidades públicas, la apuesta de las autoridades es conseguir recursos de Fondos de la Excelencia (Fonacide).

La población estudiantil de la Fiuna supera, este año, los 3.000 matriculados, según el bibliotecario. “El año pasado registramos 21.716 préstamos de libros, superando a todas las bibliotecas de la UNA”, dice.

Obsoleto

El ingeniero Francisco Arrom, consejero docente de la Fiuna, suscribe que la biblioteca tiene una infraestructura “totalmente obsoleta”, en virtud de que carece de muchos medios informáticos. “Lo que está actualizado es poco. No hay un lugar para estudio de los alumnos, la biblioteca dispone de muy poco espacio para estar adentro, no como otras que fueron construidas para áreas de lectura amplias”, señala y comenta que para cubrir ese déficit esperan recibir los recursos del Fonacide que por primera vez gestionaron este año. “Lo más urgente son los laboratorios y tener espacio en ellos. La inversión que se precisa ahí es mucho más alta”, cuenta al repasar que necesitan actualizar equipos.

La mayoría de las máquinas tienen 50 años, otras 20, 30 y otras son más nuevas. “Necesitamos renovar el laboratorio de Física”, cita uno.

“No es lo mismo manejar el equipo que mirar”, completa sin olvidar que “está en planes de comprar una partida” de equipamientos laboratoriales.

Reconoce que carecen de ancho de banda e infraestructura que les faculte a contactar con expertos de afuera. “No tenemos toda la infraestructura para eso. En el auditorio se hicieron una o dos videoconferencias, pero puntuales”.

Números

3.000 matriculados aproximadamente registra este año Ingeniería UNA.

21.716 préstamos de libros físicos se registraron el año pasado en la biblioteca.

Fuente
www.ultimahora.com
20.08.18