03-03-2017
Ganadores del Pritzker 2017
Es el premio más importante que puede recibir un arquitecto y en esta ocasión el galardón llega a manos de tres arquitectos, los que conforman el estudio RCR Arquitectes. Ellos son los catalanes Ramón Vilalta, Carme Pigem y Rafael Aranda que han logrado el galardón considerado por muchos como el equivalente al Nobel de la arquitectura.
Es la primera vez que es laureado un estudio catalán y que lo reciben, al tiempo, tres personas. Y es la segunda que recae en una firma española, después de que Rafael Moneo lo conquistara en 1996.
El jurado apreció en RCR, su “compromiso con el lugar y su narrativa”. También la manera en que su obra “armoniza la materialidad con la transparencia, entre el exterior y el interior”, logrando “una arquitectura emotiva y experimental”.
Asimismo argumentó que “vivimos en un mundo globalizado donde confiamos en las influencias internacionales. Pero cada día más personas temen que esa influencia internacional les haga perder sus valores, artes o costumbre locales. Aranda, Pigem y Vilalta han demostrado que se pueden tener ambas cosas”.
Como diseñadores de una arquitectura que es tanto estilística como físicamente local -la obra de RCR Arquitectes se encuentra mayormente en Cataluña, aunque han realizado proyectos recientes en Francia hasta Bélgica- el despacho ha establecido un fuerte perfil en el noreste de España y ha alcanzado un seguimiento de culto entre círculos académicos alrededor del mundo.
Poco después de graduarse de la Escola Tècnica Superior d’Arquitectura del Vallès (Etsav), Aranda, Pigem y Vilalta regresaron a Olot, su ciudad de origen, rodeada de cuatro volcanes dentro del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa y establecieron el estudio RCR Arquitectes, cuya oficina se emplaza en una fundidora de principios del siglo XX, remodelada. Fue en 1988.
El trío le atribuye su éxito temprano a haber ganado un concurso para diseñar el Faro Punta Aldea en 1989.
Algunos temas claves en su obra son: las conexiones entre espacios exteriores e interiores, reconocer el paso del tiempo, estructura y materialidad, y la desmaterialización de sus espacios. Uno de sus materiales más utilizados es el acero Corten. En algunos casos, simplemente el acero reciclado oxidado, se utiliza en varios de sus más reconocidos proyectos incluyendo las Bodegas de Vino Bell-Lloc, el Museo Soulages, y el Teatro La Lira. Su preferencia por este material parece estar relacionada con su deseo de mostrar el paso del tiempo con sus proyectos. "
El despacho ha sido reconocido por numerosos premios e instituciones. Además son Miembros Honorarios del American Institute of Architecture (AIA) desde el 2010 y Miembros Internacionales del Royal Institute of British Architects (Riba) desde el 2012.
Fuentes
www.plataformaarquitectura.cl
http://noticias.arq.com.mx
