Edición N° 424 - Agosto 2018

La Senavitat, lista para despegar

 
  • La ingeniera Soledad Núñez durante la entrevista con Mandu’a.

  • Cuadro de la fachada de la Senavitat.

  • Conjunto habitacional San Francisco.

  • El documento lleva el sello del Comité Nacional de Hábitat creado por el Poder Ejecutivo en el 2014 compuesto por 67 organizaciones civiles y del Estado, más la cooperación internacional de Cities Alliance.

  • Viviendas dignas para familias de Concepción.

  • La ingeniera Soledad Núñez durante la entrevista con Mandu’a.

  • El Salto cuantitativo y cualitativo en la ejecución de las políticas habitacionales se materializan en la cantidad de viviendas realizadas por la Senavitat.

  • Conjunto de viviendas construidas por la Senavitat en un área rural.

 

El legado de la ingeniera Soledad Núñez en el organismo estatal. La ministra deja el cargo con importantes logros.

Este 15 de agosto será el día del gran cambio para el Paraguay: ingresa un nuevo gobierno. Mandu’a conversó con la ministra saliente de la Senavitat para conocer cómo encontró la institución y cómo la deja. Además, la Ing. Soledad Núñez explicó sobre la Política Nacional de Vivienda y Hábitat (PNVH), que promovió conjuntamente con otros organismos y que es un legado para el país.

Ingeniera civil de profesión, la ingeniera María Soledad Núñez Méndez asumió el cargo de ministra de la Secretaría de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat) el 1 de octubre de 2014 luego de la salida de Francisco Knapps.

 

Cómo encontró la Senavitat

Soledad Núñez es la quinta ministra desde la creación de la institución en el 2010. Pasaron antes cuatro ministros salpicados algunos de ellos por denuncias de corrupción e ineficiencia. La ministra nos confió que recibió una institución tremendamente debilitada en todos los sentidos.

En primer lugar, se encontró con que había una ausencia de reglamentos, macroprocesos, procedimientos, manual de funciones, que considera como herramientas fundamentales para poner una institución en marcha. «Porque si uno no tiene esas mínimas estructuras operativas, entonces es muy difícil que se logren los objetivos que se plantean», enfatizó.

En segundo pero muy importante lugar, se encontró con muchas situaciones empañadas por los vicios propios del pasado de la institución pública: casos de corrupción. «Encontramos 4500 viviendas paralizadas. En todos ellos se había desembolsado el 50% de los anticipos de los montos contractuales. Muchas de estas empresas eran “empresas de maletín”: cuando queríamos ir a hacer las denuncias y las demandas, ni siquiera existían», aclaró.

Consultada sobre si realizó auditoría al llegar, afirmó que sí. «De hecho, tenemos muchas denuncias ante la Fiscalía y tenemos muchos casos, incluso donde hay imputados ya en varias de las causas que habíamos heredado. No escarbamos demasiado en todas las administraciones anteriores porque ni siquiera obran en el registro los expedientes de cuando esto era el Conavi, por ejemplo. O sea, hay algunos expedientes en archivo pero es impresionante el desorden, lo que te impide poder llevar e impulsar una investigación importante que desencadene en resultados positivos para las instituciones del país». ¿Y de los ministros precedentes? Sí, expresó la ministra: «En esos casos tenemos muchos de los informes de la Contraloría, muchas auditorías a los programas anteriores, por ejemplo el ex programa Cepra tiene una denuncia ante la Fiscalía, así como otros casos».

Además, Mandu’a le refirió que se tiene conocimiento de que bajo algunas de las administraciones anteriores se habrían aprobado préstamos a empresas que construían barrios privados y que estos préstamos nunca se habrían devuelto.

La ministra declaró estar en desconocimiento: «Esa información no nos llegó a nosotros. Hicimos auditorías a la cartera de préstamos, identificamos varias irregularidades que en todos los casos tomamos acciones. Algunas también eran de esa época. Pero, más que nada, lo que comenzamos a hacer es rescindir los contratos y ejecutar las hipotecas si había préstamos que se entregaron y que no se habían devuelto. Comenzamos a tomar muchísimas acciones en ese sentido». Le comentamos que cierta empresa constructora habría recibido un préstamo de la Senavitat de 2 mil millones de guaraníes y posteriormente otro similar, pero que esa empresa habría declarado una dirección falsa, y que la comunicación de la Senavitat informándole de la concesión del crédito se habría hecho en esa dirección falsa. Si bien  fue una denuncia que se realizó en su momento, la ministra declaró no haber escuchado sobre ese caso pero que pasaría a la dirección jurídica para investigar si está. «Tenemos 30 días todavía», afirmó pensando en el tiempo que le quedaba todavía en el cargo al momento de la entrevista.

Por último, comentó que encontró una capacidad operativa de la institución tremendamente disminuida.

Es mucho trabajo solamente de entrada. ¿Dónde comenzar, entonces? Afirmó que seleccionó las batallas en primera instancia: se debía robustecer la institución. Para esto, eligió fortalecer el área técnica. Es así que, de solamente 3 fiscales de obra, la Senavitat pasó a contar con más de 140. Igualmente, se amplió la cantidad de ingenieros y arquitectos. «Tecnificamos una institución que no tenía muchos técnicos en su plantel: había solo dos ingenieros y creo que 33 arquitectos en el plantel fijo (de cerca de 400 funcionarios). Y eso nos ayudó a acortar plazos de obras y a poder elevar también la calidad de las viviendas que estábamos entregando de una manera inmediata», puntualizó.

Pero los resultados a corto plazo no vinieron solos. «A la par, empezamos a trabajar en las reformas de fondo que eran las reformas de largo plazo que hoy dejamos como un legado... Como la Política Nacional de Vivienda y Hábitat, como las leyes que promovimos, como los nuevos reglamentos que implementamos que requieren de mayor tiempo», precisó.

 

Plan Nacional de Vivienda y Hábitat (PNVH)

Impulsado y liderado por la Senavitat bajo su administración, este Plan Nacional de Vivienda y Hábitat se realizó a través del Comité Nacional del Hábitat, una instancia de convergencia intersectorial creada por decreto presidencial en la que participaron cerca de setenta instituciones. Fue posible, además, gracias a la cooperación internacional de Cities Alliance y la asistencia del Centro de Investigación, Desarrollo e Investigación de la Facultad de Diseño y Arquitectura de la UNA (CIDi-FADA).

«Constituye una hoja de ruta para los próximos 20 años», explica la ministra en el documento preliminar disponible en el sitio web de la Senavitat, donde también indica que esta política está enmarcada en los lineamientos normativos nacionales, así como en acuerdos internacionales suscriptos como la Nueva Agenda Urbana aprobada en Hábitat III y otros vigentes.

En la entrevista, la Ing. Soledad Núñez nos comentó que «más que nada, esta política es un gran paraguas de los temas conceptuales en los que tenemos que ponernos de acuerdo todos en una primera instancia y que queremos sea la antesala para que en el siguiente periodo de gobierno esto se convierta ya un plan de acción a nivel territorial».

Según el documento de la Senavitat, los principios en los cuales está basado este PNVH son: universalidad, integralidad, gestión democrática, corresponsabilidad proporcional, función social de la propiedad política pública basada en realidades. Además, está articulado sobre 3 ejes principales, cada uno con 4 objetivos específicos, 12 en total

 

Gobernanza e institucionalidad

Los objetivos específicos de este primer eje son:

1. Promover la articulación interinstitucional.

2. Impulsar la participación ciudadana protagónica y la transparencia en los procesos de planificación e implementación de acciones.

3. Fortalecer las capacidades en materia de producción del hábitat y la vivienda.

4. Impulsar y adecuar los marcos legales vigentes e impulsar nuevos instrumentos o mejoras en los mismos.

Sobre este eje, nos explicó la ministra que tiene que ver con los niveles de gobernancia y cómo se articulan los gobiernos centrales y los gobiernos locales para garantizar una política de vivienda y de hábitat que funcione. Es decir, una necesidad de que los propios gobiernos locales se empoderen en los próximos años en lo que se refiere a la administración de su territorio. Soledad Núñez sostiene que hoy en día hay serias debilidades: «Me animo a decir que incluso hay municipios donde ni siquiera tienen un arquitecto o un ingeniero, no tienen técnicos. Entonces, el resultado es una ciudad caótica, no planificada, con un montón de ineficiencias en lo que se refiere a la infraestructura de prestación de servicios».

Y esta situación no ocurre solo en el interior, también ocurre en el Gran Asunción. Al respecto, afirmó la ministra que existe una ausencia de una gobernancia metropolitana, que es algo que necesita el área metropolitana de Asunción porque otras ciudades ya están completamente mimetizadas. «No es que uno puede proveer servicios solamente a Asunción y olvidarse de Lambaré, Fernando de la Mora y San Lorenzo. Esto tiene que funcionar como un todo. Entonces, se hace un énfasis en la necesidad que desde el Estado y el Gobierno se redefinan las prioridades de los roles que cumplen los diferentes gobiernos».

 

Planificación y diseño

Los objetivos específicos de este segundo eje son:

5. Promover el desarrollo de una base de datos integrada para el diseño y la elaboración de políticas públicas en el ámbito habitacional.

6. Impulsar el ordenamiento y desarrollo territorial sostenible con cohesión social.

7. Propiciar la tenencia segura de la tierra.

8. Impulsar la producción de viviendas y hábitats adecuados. (Esto, dentro del marco de acciones coordinadas para la superación del déficit cualitativo y cuantitativo de viviendas).

La Ing. Soledad Núñez se refiere a este eje indicando que en cuanto a la planificación y diseño de nuestras urbes, hay una necesidad de contar con ciertas herramientas e instrumentos que puedan ayudar a gestionar mucho mejor las ciudades.

 

Económico-financiero

Los objetivos específicos de este último eje son:

9. Promover la optimización de los recursos disponibles desde el Estado y otros sectores para el fortalecimiento de la inversión pública en el sector habitacional.

10. Impulsar la creación y el fortalecimiento de mecanismos de financiamiento alternativos para el desarrollo del hábitat y la vivienda.

11. Propiciar el incremento de la eficiencia económica en la producción del hábitat y la vivienda.

12. Impulsar opciones de financiación del desarrollo territorial y acceso a viviendas asequibles.

Sobre este eje, nos comentó que el financiamiento del desarrollo urbano es un tema a discutir, no solamente desde la institución rectora de la política de vivienda, sino que también con el Ministerio de Hacienda, con la Secretaría Técnica de Planificación y con otras instituciones que tienen competencia en el tema. «Porque o si no, estamos perdiendo la posibilidad de captar plusvalías sobre las intervenciones que se hacen en las ciudades en materia de infraestructura». Continuó luego explicando la Ing. Soledad Núñez que entonces se toca también una línea específica de financiamiento del desarrollo urbano sostenible. En este sentido, se van abordando un montón de temas, como la gestión del suelo, el mercado de suelos, de la tierra, la importancia de catastro, de la regularización de obras. Puntualizó además que todos esos detalles son tocados en el marco de una de las líneas, a más de ir abordando los temas que guardan relación con las densidades más adecuadas para las ciudades para crear valor… Es decir, son muchos conceptos a tener en cuenta.

 

Cómo deja la institución

La Ing. Soledad Núñez afirmó que cierra este periodo de gobierno con una cartera que administra 37.161 beneficiarios, donde 30 mil viviendas espera tener concluidas al 15 de agosto y el resto, 7.161, quedarían en ejecución. «Es decir, dejamos una institución andando.

De una institución que recibimos con viviendas paralizadas, con proyectos que no se estaban ejecutando, hoy dejamos una institución sobre ruedas, una institución que está transitando y que tiene todas las capacidades para crecer mucho más en los próximos años y poder potenciarse a partir de lo que se pudo lograr».

Para conocer dónde están ubicadas las viviendas ejecutadas y en proceso de ejecución a lo largo del país, se puede acceder al mapa de viviendas siguiendo este enlace o escaneando el código QR:

https://www.senavitat.gov.py/mapaviviendas/

Tareas para el Gobierno entrante

Para calcular mejor el trabajo pendiente, no solo para la siguiente administración, sino las venideras, conozcamos primero los datos de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (DGEEC).

Según datos basados en la encuesta del 2012, cuyo análisis fue publicado en diciembre de 2016, la DGEEC estima que los requerimientos habitacionales cuantitativos y cualitativos a nivel nacional totalizan 780.073 viviendas. El 88% de éstas corresponde a viviendas con déficit cualitativo. Esto significa que existe mayor déficit en la calidad de viviendas ya existentes, más que en la cantidad de nuevas viviendas requeridas.

En cuanto a las viviendas nuevas que hacen falta, para cubrir el déficit cuantitativo se deben construir 96.546 viviendas, de las cuales 77.870 se encuentran en el área urbana y 18.876 en el área rural. Es decir que en el área urbana se concentra el 81% del requerimiento total de nuevas unidades habitacionales. El estudio estima que se requieren a nivel nacional cerca de 15 nuevas viviendas por cada 1000 habitantes.

 

En síntesis:

Fuente: DGEEC.

Si bien la ministra saliente considera que durante su administración se logró tener una cobertura bastante importante, ella sugiere que se evalúe en el siguiente periodo de gobierno para ver cuánto es lo que queda por hacer porque el crecimiento vegetativo es lo que se debe estudiar en mayor detalle. ¿Qué significa esto? La Ing. Soledad Núñez explicó que se refiere a los nuevos núcleos de los hogares que se van conformando, según los diferentes niveles socio económicos, si están en situación de vulnerabilidad, si representan al sector de ingresos medios, dónde están viviendo, etc. Comentó que ese es un estudio que tiene entendido está trabajando ahora Conacyt en una investigación para el área metropolitana. «Proponemos que sea un análisis más acabado porque calculando en una matemática simple los datos que tenemos, podemos decir que hemos llegado casi al 30% de ese déficit cuantitativo. Pero en esto no se considera todavía el crecimiento vegetativo. Lo que sí nosotros estamos convencidos es que logramos estancar el crecimiento del déficit. O sea, definitivamente en estos años, con la inversión que se hizo, con los resultados que se obtuvieron, estancamos el crecimiento del déficit». De todas maneras, ella considera que esto debería estudiarse con mayor detalle.

Sobre cuánto debería construirse todavía, la ministra cree que las condiciones están dadas para que en un siguiente periodo de gobierno se entreguen entre 60 mil y 80 mil viviendas. Pareciera mucho para cinco años, pero la Ing. Soledad Núñez considera que no es descabellado pensar en esto. «Sí, son muchos recursos los necesarios, pero que si se sostiene y se alimenta el sector, podríamos en 10 años tener superado el problema de vivienda para toda la población. La ventaja que tiene Paraguay es que somos un país acotado, de apenas 7 millones de habitantes, con una concentración de la población en determinadas ciudades y eso nos da una ventaja que en poco tiempo podemos ver resultados a gran escala», aseveró.

Es importante recordar que este trabajo se sostiene en gran parte con donaciones extranjeras. En este sentido, expresó que deja una institución donde tuvo en estos cinco años una donación de China (Taiwán) de 71 millones de dólares cuyo programa se comprometió y ejecutó en su totalidad. «O sea –aclaró–, queda el último remanente de 5 proyectos que van a quedar en ejecución pero está 100% organizado y comprometido». Además, la institución contó con un crédito del BID que se aprobó el año pasado que tiene un horizonte de ejecución de 4 años, que son 30 millones de dólares, que quedan también en manos de la siguiente administración. «Por eso yo resalto y digo que estamos dejando una institución andando. Dejamos una cartera de proyectos. Dejamos proyectos ejecutivos elaborados, que para eso se requiere destinar un año, a veces un año y medio de tiempo para llegar al nivel de especificaciones técnicas y proyectos ejecutivos para que algo se pueda impulsar. Todo esto está recibiendo la siguiente administración para poder escalar las soluciones y llegar a las 60 mil, 80 mil viviendas que necesita el Paraguay», ratificó.

 

Después del 15 de agosto...

«¿Adónde vuelve?», le preguntamos a la Ing. Soledad Núñez. «Esa es la gran pregunta», contestó entre risas. Recordemos que antes de asumir el cargo provenía de la sociedad civil, de la organización Un techo para mi país. Lo seguro es que allí no vuelve puesto que considera que esa institución está avanzando y creciendo con sus propios liderazgos juveniles (es una organización de jóvenes, la mayoría tiene entre 20 y 30 años). «Ya anda sobre ruedas. Es un pequeño legado, digamos. Siempre estamos acompañando, ayudando y asesorando, pero eso camina solo. Tiene ya su propio músculo», afirmó.

Al asumir el cargo en el 2014, en la conferencia de prensa, la ministra hablaba de su compromiso y su convicción para trabajar con honestidad y transparencia. Esto continúa en su agenda: «La verdad es que tengo varias ideas de cosas que quiero emprender en beneficio del país, tengo un compromiso muy grande con la causa, no con el cargo ni con la silla. Así como mi aspiración no era estar sentada aquí, sino simplemente trabajar por el Paraguay, es lo mismo que voy a estar haciendo después del 15 de agosto. Voy a estar comunicando oportunamente la decisión que tome entre todas las alternativas que tengo», expresó finalmente.

Adonde sea que vaya luego, a la Revista Mandu’a solamente le resta desearle muchos éxitos y agradecerle por todo el trabajo realizado, puesto que consideramos la suya como la mejor administración de la Senavitat. Esta opinión está avalada por una investigación sobre credibilidad de los ministerios encargada por el Diario Última Hora al Centro de Investigación y Estudios Socioeconómicos (CIES). Según este estudio, la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat es la institución de mayor credibilidad en el ranking.

Es así que preservar el legado de la Ing. Soledad Núñez es, sin dudas, un desafío para el nuevo gobierno. En principio, será una administración política, más que técnica, por lo que expresamos nuestra preocupación sobre la futura gestión. Por este motivo, debemos estar expectantes y exigir que no se vuelva a los oscuros tiempos de la corrupción y la ineficiencia. Que se siga la línea comenzada y trazada para cumplir lo que el Plan Nacional de Vivienda y Hábitat pretende para dar solución definitiva al déficit que tiene nuestro país en cuanto a vivienda. El Paraguay no solamente lo necesita, sino que lo merece.

 

Texto: Rebeca González Garcete
Entrevista: MAH

 

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