Edición N° 439 - Noviembre 2019

Disertantes internacionales en conferencias de la BIAU

 
  • Los conferencistas compartieron experiencias con un público ávido de conocimiento

 

En el marco de la Biau 2019 se desarrollaron interesantes conferencias a cargo de disertantes internacionales, algunos de los cuales, gentilmente cedieron unos minutos de su tiempo para una entrevista con Mandu’a comentar brevemente sus experiencias y perspectivas acerca de la arquitectura iberoamericana actual.

Para dar inició a las entrevistas, el arquitecto paraguayo Solano Benítez, presidente del jurado Panorama de Obras (junto con la arquitecta Gloria Cabral), brindó algunas palabras con respecto a este evento: “Se trata de una actividad increíble, con ponentes destacados de Iberoamérica, que vinieron a nuestro país para compartir sus experiencias, por lo que les agradecemos por su presencia”.

Señaló que “se puede resaltar también lo que el equipo paraguayo de la bienal pudo hacer y acrecentar, donde sobre todo se percibe una transformación de la Biau en el sentido de aproximarla a los lugares donde los arquitectos deberían estar más presentes y en ese sentido hay trece fabulosas intervenciones en la Chacarita, más las exposiciones en el Ferrocarril y el ciclo de conferencias muy productivas, en especial para los jóvenes”.

Y agregó que “aquí, Paraguay lo que hizo fue transformar la Bienal del ámbito de centros culturales, a fin de acercar más a las personas. Recogió experiencias de todo tipo para transformarlas en la palabra clave: habitar”. .

 

 “A través de la arquitectura se puede crear soluciones” 

Arquitecto José María Sáez (España). La Biau siempre ha tenido esa característica de traer lo mejor de la arquitectura de España, Portugal y Latinoamérica y me parece una elección obvia hacer ese evento en el Paraguay, que tiene una de las canteras de experimentación en arquitectura más interesantes de Latinoamérica. Paraguay es un referente en esta área y además no sólo se trató de hacer la sede para un grupo de gente que está involucrada en la disciplina, sino que esta Biau está en la Chacharita, es decir, sale hacia otros problemas, otros públicos. Creo que incluso mucha gente de la vieja Asunción, que estuvo por la Chacharita, probablemente no habría ido a este sitio si no hubiese sido por esta convocatoria.

Los arquitectos debemos ver la sociedad y cómo a través de la arquitectura se puede crear soluciones. No hay buena arquitectura si no es aquella que soluciona los problemas emergentes, que es apropiada para los recursos, para la gente, para la cultura, para el contexto.

Pienso que un buen arquitecto debería ser buena persona, que entienda su contexto, que quiera aportar, que no tenga egos, que trabaje en grupo e interdisciplinariamente, que sepa solucionar y eso es lo que saben hacer en Paraguay. Una mente crítica significa dejar de hacer lo que has hecho siempre y buscar otro punto de vista; se trata de uno de los pilares en esta área.

Mi charla enfoca que no sólo hay que entender la arquitectura, sino también el modo en que nos encontramos en este momento frente a los problemas y eso significa un cambio cultural gigantesco, ya que la cultura simplemente se adapta a las realidades o desaparece y es sustituida por otras culturas. Este cambio es justamente lo que nos convocó en la Bienal.

Como profesionales en arquitectura debemos tratar de construir menos y adaptarnos al medio, en lugar de transformarlo. Por ejemplo, climatizar aprovechando los elementos naturales del medio, es decir, que nosotros nos adaptemos al medio y que las transformaciones del entorno sean mínimas, y no que la transformación sea artificializar el clima y tener que hacer un sobreesfuerzo para lograr el confort térmico. Hay que recordar que al hacer menos se logra más.

 

 “La buena arquitectura es aquella que genera afecto hacia las personas que la van a habitar” 

Arquitecto Toni Gironés Saderra (España). Las iniciativas de la Biau siempre están muy bien, pero particularmente en el Paraguay están muy bien enfocadas, pues un evento que normalmente queda cerrado en el mundo de la cultura y que, por lo general, es determinado para ciertas personas, se ha abierto completamente para la población, por medio de acciones concretas, como las de la Chacharita. No tiene sentido la arquitectura si no transciende los límites de la disciplina como tal y llega a la sociedad. En esta Bienal, el hecho de ir más allá del ámbito propio del evento es un valor fuerte de Paraguay”.

Además agregó que “normalmente se entiende que la arquitectura es algo diferente, más original, que de alguna manera genera efectos especiales respecto a lo que la gente está acostumbrada a vivir o ver, yo cambiaría esa palabra efectos especiales por afecto hacia las personas. Es decir, la buena arquitectura es aquella que genera afecto hacia las personas que la van a habitar. Nosotros somos especialistas en habitar, en optimizar el habitar, así como los recursos, en entender el lugar que estás habitando y, al final, hacer que todo se concrete en armonía, esa es la buena arquitectura.

Con relación a optimizar los recursos, algunos han dejado ser naturales, pero de igual manera participan en la arquitectura, ya que se puede construir esa habitabilidad que al final es tener un determinado espacio donde climáticamente te encuentres bien, donde los límites entre el espacio más privado y el más público hagan sus transiciones correctamente, donde se pueda optimizar la luz natural desde la mañana a la noche sin necesidad de prender la luz artificial, donde no tengas necesidad de construir un clima artificial, donde todo esto además se hace con los recursos que se dispone cerca. Por lo tanto, de alguna manera se podrá adaptarse mejor a lo que el soporte, que es el planeta, nos está brindando. Por el contrario, si consigues un clima artificial, los recursos crecen de forma exponencial, entrando en una cadena de valor y de consumo, en donde lo único que importa es la economía y cómo generar más y más y, por ende, se desequilibra la relación con el planeta, eso es no optimizar los recursos.   

Cabe resaltar que un buen arquitecto primero debe saber leer las condiciones vinculadas a esa habitabilidad que hay en los lugares donde se va a intervenir. Es decir, fluir de manera armónica con el medio, y esto se puede conseguir en cualquier lugar del planeta.

 

 “Es una forma de reconectar este vínculo entre la profesión y la gente” 

Arquitecto Nicolás Campodónico (Argentina). La XI Biau es un evento único y en Asunción han logrado darle un carácter inédito, ya que esta Bienal ha salido a las calles a través de las operaciones en la Chacharita, aparte de las ponencias desarrolladas me parece que la idea de que la arquitectura se comunique con la sociedad fue una gran idea bien lograda. Me parece como una forma de reconectar este vínculo entre la profesión y la gente.

Las intervenciones me parecieron muy positivas, por sobre todo el impacto en la gente, porque son lugares relegados y el hecho de poder entrar y que la gente te reciba de la mejor manera, con una sonrisa o con la alegría de los niños, es muy gratificante. Cabe resaltar que algunos proyectos están más avanzados, otros menos, pero lo importante es esta semilla, por lo que sería importante que la dirigencia política apoyara estas iniciativas y que de alguna manera se pudiesen concretar todos estos proyectos.

Mi tema se basó en una exposición retrospectiva sobre los 20 años de trabajo que se resumen mostrando cinco proyectos que, de alguna manera, ilustran cinco puntos que para mí son muy importantes, que son: la luz, el espacio, la materia, el lugar y el tiempo. Temas que son de la arquitectura, pero que también son de la existencia humana plasmados en mis obras.

Hoy nos encontramos ante un momento muy particular en el que muchas arquitecturas distintas pueden coincidir y coexistir, eso no ocurría en la antigüedad, creo que esto tendría que ver con la globalización y con los medios de comunicación. Creo que acá, en el Paraguay particularmente, hay un grupo de arquitectos jóvenes, así como los que tienen más experiencia y también mucha energía, que están haciendo una arquitectura muy interesante, de hecho que a nivel mundial están impactando, ya que han logrado reconvertir técnicas y materiales que han sido utilizados ancestralmente en códigos contemporáneos, tanto de aplicación como una estética renovada, fresca y auténtica.

 

 “Estos tipos de eventos son grandes aprendizajes para los estudiantes” 

Arquitecta Sandra Barclay (Perú). Este evento fue muy bien organizado, hemos hecho un recorrido a la Chacharita para apreciar estas microintervenciones que tienen un efecto positivo en la gente y en la manera de cómo se vive, porque lo resaltante es que se están generando espacios de encuentros, de atracción para el público.

Está muy interesante poner esfuerzos y recursos en la realidad, a partir de la Bienal, no sólo como una exposición o una muestra de proyectos, sino que realmente ya hay algunos que están en proceso y que se van a seguir desarrollando.

La diferencia de esta Bienal en particular es sobre el enfoque de la acción sobre la realidad en la Chacarita, porque en anteriores bienales siempre había muchas actividades y conferencistas y es realmente un momento de reunión de varios arquitectos donde se conversa de ideas y se muestran trabajos. Para los estudiantes es muy enriquecedor porque ven a arquitectos trabajando, todos más o menos hacia la misma dirección, cuidando los recursos, siendo atentos al lugar, sensibles al clima, entonces estos eventos son grandes aprendizajes para los alumnos. Creo que esto es lo que tienen en común todas las bienales, pero en esta lo añadido es la acción sobre la realidad”.

En este evento dimos a conocer nuestros proyectos. Ahora estamos trabajando en distintas partes del territorio peruano. Nosotros trabajamos mucho con el territorio, con las lógicas del lugar, con la inserción del paisaje, entonces nuestra preocupación está ahí para que los proyectos tengan real sentido.

La arquitectura actual depende mucho de los esfuerzos y de las buenas intenciones de los profesionales, creo que lo fundamental es trabajar pensando en que el proyecto le brinde algo beneficioso a la ciudad, ya que cada proyecto, aunque sea individual, construye ciudades. El fin principal es que los ciudadanos puedan vivir en sitios cada vez más amables, con más cantidad de espacios púbicos, más transparencia.

Una recomendación a los estudiantes, que son los que tienen el futuro en sus manos, es que trabajen con mucho entusiasmo, rigor y esfuerzo porque al final es eso lo que uno necesita. Hay que agradecer tener la posibilidad de asistir a esta clase de eventos y contar con estas oportunidades de aprendizaje, invertir en tiempo y dedicación. Si bien es una profesión que exige mucho, pero también da muchas satisfacciones.

 

 “La actitud, una característica en común en los conferencistas” 

Jean Pierre Crousse (Perú). He estado en otras bienales iberoamericanas y me parece que esta es la mejor que he visto por esta compenetración del lugar con la temática que se discute. Por sobre todo considerando dos aspectos, que la bienal no se queda en teatro con expositores, sino que sale a las calles y trata de mejorar la Chacarita, es decir, revitalizar las condiciones de la ciudad misma y, por otro lado, vemos a los invitados que han sido seleccionados justamente no por lo bonito de sus edificios, no porque se parezcan o se diferencien, sino porque son reflejos de una actitud y esta es similar en todos los conferencistas; detalle que también hace única esta Bienal.

Respecto a las intervenciones en la Chacarita hay muchas que aún no se han realizado, que se van a desarrollar. Me parece que ahí el proyecto no debe terminar, pues hay un trabajo importante por hacer, sobre todo con el manejo de los desechos, de la basura en los arroyos. Porque en la ciudad no es solo dar sombra o brindar espacios públicos, que se están haciendo y me parece muy bien, sino que también es dar dignidad a estos sitios, es decir, que se vean limpios, que esta basura quizás se pueda reciclar y sacar provecho de ella. Que no sea un espacio abandonado, en donde no se genere soluciones, al contrario, porque cuando los pobladores ven que esto se puede mejorar es cuando la actitud de ellos también va a cambiar.

La arquitectura del Paraguay es una de las mejores de Latinoamérica, hay arquitectos aquí que están trabajando con los elementos que tienen a disposición y que están empujando hacia adelante la arquitectura a nivel mundial. Esta profesión debe apuntar siempre a mejorar la calidad de vida de las personas, para eso está hecha.

 

Texto: Delicia Arzamendia
Fotos: Invernadero

 

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