30-11-1999
Frei Otto, Pritzker 2015, primer galardonado post mortem
Calificado como “utópico, ecologista, pionero de los materiales ligeros”, por el jurado del premio
El pasado 10 de marzo se anunció oficialmente el Premio Pritzker de Arquitectura 2015, en la Fundación Hyatt, en Chicago.

Miembros del jurado tuvieron ocasión de visitarle en su domicilio y comunicarle el premio en fechas recientes.
En su argumentación, el jurado calificó a Frei Otto, segundo alemán que obtiene esta distinción, como un arquitecto "visionario, utópico, ecologista, pionero de los materiales ligeros, protector de los recursos naturales y generoso colaborador con otros arquitectos, ingenieros, biólogos y demás profesionales".
También como un ejemplo para las nuevas generaciones. Frei Otto trabajó en su línea motivado por preocupaciones ecológicas, de las que fue pionero en su campo, y también económicas. "Me inspiró -había manifestado el galardonado- el deseo de diseñar nuevos tipos de edificios que pudieran ayudar a la gente afectada por catástrofes naturales".
Dejando a un lado la célebre obra en Múnich, la cubierta para la arena olímpica Alemania 72 -ejemplo de su arquitectura ligera, abierta a la luz y la naturaleza, de bajo coste y tan distinta del pesado neoclasicismo propio del régimen nazi en el que creció-, Frei Otto es también conocido por trabajos como el pabellón alemán en la Exposición de 1967, el pabellón japonés en la Expo 2000 de Hannover o diversas series de estructuras tipo carpa en exposiciones alemanas de los años 50, así como por varios trabajos en Oriente Medio.
Al Premio Pritzker se suman otros galardones no menos importantes como el Aga Khan de Arquitectura, en dos ocasiones, la Medalla de Oro del RIBA y el Premio Imperial del Japón.