Edición N° 377 - Septiembre 2014

"La arquitectura y el cine" promete filmes interesantes

Como todos los martes, a partir de las 18 en el aula magna de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte (Fada) en el Campus de San Lorenzo, continúa este mes de septiembre el ciclo La arquitectura y el cine que iniciara la exhibición de clásicos del séptimo arte en el año 2007, con la proyección de las películas El volar es para los pájaros de Robert Altman, Juana la loca de Vicente Aranda, La ciudad está tranquila de Robert Guédiguian, Pieza inconclusa para piano mecánico de Nikita Mikhalkov y Ringu de Hideo Nakata.

Esta actividad cultural de extensión es promovida por la Fada como un espacio dedicado a la comunidad educativa, los jóvenes estudiantes y a la sociedad en general interesada en  tener un acercamiento a la dimensión arquitectónica a través de la óptica cinematográfica.

Programa

Martes 2. El volar es para los pájaros (Título original: Brewster McCloud, 1970). Este filme de procedencia estadounidense, dirigido por Robert Altman e interpretado por Bud Cort, Shelley Duvall, Sally Kellerman, Michael Murphy y Stacy Keach, tiene una duración de 105 minutos.
Brewster McCloud es un chico serio e intelectual que vive en el refugio atómico  del Astrodome de Houston y su sueño es volar dentro del espacio del estadio con alas especialmente confeccionadas por él mismo. Su entusiasmo le lleva a contar su proyecto a aquellos en los que confía. Louise es una extraña amiga que lo ayuda, en tanto que en la ciudad se suceden misteriosas muertes que guardan relación con el ingenuo Brewster. El día señalado, el joven apronta su equipo y se dispone a realizar su proeza con grandes inconvenientes…
Robert Altman ha sido uno de los mayores iconoclastas del cine de los Estados Unidos, su burla del sistema ha sido demoledora. El volar es para los pájaros es una insolente comedia de humor negro que no deja títere con cabeza, aunque el joven Brewster McCloud tenga que soportar las consecuencias de su audacia de ser distinto. Altman realizó una película ocurrente, eficaz en su propuesta y sumamente divertida. La filmación se realizó  en gran parte en el Reliant Astrodome de Houston (Texas), obra de los arquitectos Hermon Lloyd & W.B. Morgan and Wilson, Morris, Crain & Anderson.

Martes 9. Juana la loca (Juana la loca, 2001). Coproducida por España, Italia y Portugal, la película está basada en la historia de amor y celos de Juana I de Castilla y Felipe de Habsburgo. Fue dirigida por Vicente Aranda y protagonizada por Pilar López de Ayala, Daniele Liotti, Rosana Pastor y Giuliano Gemma.
Juana I de Castilla -hija de los Reyes Católicos y apodada “la loca”- se une en matrimonio “por razón de estado” con Felipe de Habsburgo, “el hermoso”. Cuando se conocieron fue un amor a primera vista, para Juana un amor devastador, para Felipe una de las tantas parejas femeninas que conquistó, lo que rápidamente Juana detectó. Al morir su madre -Isabel de Castilla- el padre. Fernando de Aragón, no quiere entregarle el trono a su hija porque sostiene que heredó la locura de su abuela y apoya la delegación del reinado a su yerno. Las incurables infidelidades de Felipe poco a poco desquician a Juana.
Vicente Aranda ha retomado un personaje de contornos casi míticos, Juana I de Castilla, “la loca”, cosa que pasó mucho antes con “Locura de amor”, un gran éxito del cine español de la época franquista.
La nueva Juana la loca no tuvo restricciones de producción, los rubros técnicos y artísticos son de primera y la semblanza del personaje interpretado por Pilar López de Ayala es muy humana y sugestiva. Una interpretación de la historia española muy diferente.
El filme, de 117 minutos de duración, ha logrado el premio Concha de Plata a la Mejor Actriz (Pilar López de Ayala) en el Festival Internacional Cinematográfico de San Sebastián 2001.

Martes 16. La ciudad está tranquila (La ville est tranquille, 2000). El filme de origen francés y 133 minutos de duración, tiene como director a Robert Guédiguian y en los roles principales a Ariane Ascaride, Jean-Pierre Darrousin, Gérard Meylan y Christine Brücher.
La historia transcurre en Marsella, una ciudad asoleada y al parecer tranquila. Una obrera portuaria con una hija drogadicta, un taciturno dueño de bar con una terrible vida secreta, un taxista con problemas personales, una profesora de música con conflictos conyugales, un muchacho negro inmigrante y otros más, entrecruzan sus vidas y dramas. La ciudad está verdaderamente en crisis.
El director francés de origen armenio Robert Guédiguian rindió homenaje a su ciudad -Marsella- con una historia de variados personajes que no pueden disfrutar del sol del mediodía francés por razones personales terribles. La ciudad está tranquila es una película inquietante, preocupante, denunciante, pero intensamente humana.  Su realizador, Guédiguian fue premiado con la Espiga de Oro del Festival Internacional Cinematográfico de Valladolid 2000, al igual que Ariane Ascaride, galardonada como Mejor Actriz.

Martes 23. Pieza inconclusa para piano mecánico (Neokonchennaya pyesa dlya mekhalicheskogo pianino, 1977). Película rusa del realizador Nikita Mikhalkov, protagonizada por  Aleksandr Kalyagin, Elena Solovey, Evgeniya Glushenko, Antonina Shuranova y Nikita Mikhalkov.
La escena se sitúa a comienzos del siglo XX. Una familia y sus amigos comparten una “dacha” rural en la Rusia zarista, perteneciente a Anna Petrovna, viuda de un general. Sofía, Misha, Sashenka, Nikolai y otros más realizan juegos de salón, conversaciones banales, serias conversaciones sobre los derechos de la mujer, disquisiciones sobre la capacidad de los campesinos, pero sobre todo arriesgan decisiones amorosas.
Nikita Mikhalkov, también guionista y actor de cine, es un director de la generación intermedia del cine soviético, con un espíritu tradicional e innovador al mismo tiempo. La pieza teatral Platonov  de Anton Chejov le sirvió de base para una película que reúne a un grupo humano diverso en los últimos años del régimen zarista. El director retrata el hundimiento moral de sus protagonistas. El estilo retro convierte a esta película en un verdadero placer para los amantes de los grandes clásicos rusos.
La calidad del análisis de personajes es notable, con un elenco de sólidos actores rusos en un ambiente de pereza veraniega. La melancolía de Chejov se siente en todo el transcurso del film.
Este filme se presentó en el año de su creación en el prestigioso festival de cine de San Sebastián, donde obtuvo el premio Concha de Oro a la Mejor película. En Cartagena fue distinguido con el premio especial del jurado al mejor actor Alexandr Kalyagin y en el Chicago Film Critics fue laureada como la Mejor película.

Reiko es una mujer que investiga “un video maldito” por medio de entrevistas a varias chicas. Cuando su sobrina Tomoko fallece de “un súbito ataque al corazón” ella prosigue su tarea con más ímpetu. Reiko descubre que las chicas que pasaron la semana pasada con Tomoko también han fallecido hasta que finalmente tras la pista encuentra en una cabaña un video sellado. Reiko analiza el video, otro tanto lo hace su ex marido, pero cuando Yoichi -el hijo de ambos- repite la acción de los padres, las cosas se ponen terroríficas.
Ringu alcanzó gran notoriedad en el género de terror en su momento, por lo que Hollywood realizó su versión. Naturalmente que la película japonesa alcanza unos niveles de paranoia muy intensos, cosa que en los Estados Unidos es algo mecánico, habitualmente. Los directores japoneses siempre se han destacado en ese género, pero el enlace del relato con los medios audiovisuales del siglo XX son notables en Ringu, una historia que inquietó y sigue inquietando a muchos. Es un clásico del cine de terror para ver en grupo.
De 96 minutos de duración, fue galardonada en el Festival Cinematográfico Catalán de Sitges 1999 como Mejor película y Mejores efectos visuales. También recibió el Cuervo de Oro a la Mejor película en el Festival Cinematográfico Internacional de Bruselas de Películas fantásticas 1999; y la Concha de Oro del Festival Cinematográfico Internacional de San Sebastián 1999 a Nanako Matsushima como Mejor actriz.