Edición N° 436 - Agosto 2019
Noti Mandu'a
La joya de la Bauhaus que la Argentina desprecia
El emblemático Parador Ariston de Mar del Plata, en ruinas. Fue diseñado para el húngaro Marcel Breuer en 1948
Uno de los movimientos más influyentes de las vanguardias del siglo XX cumplió cien años. La Bauhaus fue la escuela de arquitectura y diseño fundado por Walter Gropius en Weimar, abril de 1919. Clausurada por los nazis en 1933, la escuela se había dedicado a crear un estilo limpio, sin ornamentos, ya la vivienda popular de alta calidad. Argentina tiene el único edificio de la mano de uno de los maestros de la Bauhaus, el Parador Ariston de Mar del Plata.
En 1948, el húngaro Marcel Breuer dictaba un seminario en la Universidad de Buenos Aires cuando su colega argentino Carlos Coire le propuso un punto de encuentro social para el barrio La Serena. La anécdota es que Breuer inmediatamente dibujó el “trébol” de cuatro hojas que mataron al parador. La obra fue llevada a cabo por Coire y Eduardo Catalano.
Breuer había estudiado en la Bauhaus y había dirigido el equipo de diseño de muebles. Bajo su gestión se ha creado la silla emblemática Wassily. En 1928 se había mudado a Berlín para dedicarse a la arquitectura, pero tras la llegada de Adolf Hitler al poder, acompañó a sus colegas de Weimar al exilio en Estados Unidos.
El edificio de la zona sur de Mar del Plata fue un éxito inmediato, tanto en su forma original como en su fábrica de hormigón, madera y vidrio, como su doble función de restaurante diurno y disco nocturno. En su apogeo en los años cincuenta, el Ariston tenía una pista de baile giratoria y cada cliente recibía una bolsita de talco para poder bailar descalzo sin resbalarse.
Como con otros patrimonios de la misma región y estilo -la Casa del Puente, por ejemplo- el tiempo fue duro con el Ariston. Primero se dividió en tres restaurantes, que se llenaron de agregados, y luego se abandonaron a los vándalos, que incendiaron varias veces. Hoy, lo que queda es apenas el hormigón original, con todos los certificados arreglados o quemados. Una campaña busca que el parador sea declarado patrimonio y reciba una consolidación y restauración
Fuente
www.pagina12.com.ar