Edición N° 382 - Febrero 2015

Rafael Iglesia, el elegido

 

Una vez más, como sucede desde hace once años, el Ranking de ARQ deja mucha tela para cortar. La Encuesta de excelencia profesional 2014 arrojó resultados sorprendentes en las categorías Estudios de arquitectura y Voces emergentes, mostró guarismos estables en los rubros Empresas constructoras y Proveedoras de materiales, y tuvo varias sorpresas en la sección de Empresas desarrolladoras. 


Entre los estudios consagrados, sin lugar a dudas, la mayor sorpresa fue el salto del rosarino Rafael Iglesia del tercer lugar, que mantenía desde hace dos años, al primero, superando a los clásicos elegidos de siempre: Mario Roberto Alvarez y Asociados y M/SG/S/S/S.
Iglesia se impuso en todos los atributos que incluye la encuesta que realiza D’Alessio Irol para ARQ. Inclusive en algunas categorías como Preservación de patrimonio, Gestión comercial o marketing que el rosarino tiene poco en cuenta. Lo que muestra que la popularidad de este arquitecto rebasa todas las categorías establecidas dentro y fuera de esta encuesta. 


Desde hace unos años, la figura de Iglesia fue creciendo a pesar de sus problemas de salud. Su obra fue ampliamente revalorizada por sus colegas y cada nueva conferencia se convirtió en un éxito de público.
En silla de ruedas, asistido por algún amigo (como el paraguayo Solano Benítez), Iglesia siempre se las arregla para convertir una charla de arquitectura en un espectáculo. Ensaya opiniones sobre la función y el destino de la arquitectura y lecciones de vida que el público aplaude de pie. 


Los resultados del Ranking no hacen más que confirmar que ya alcanzó el Olimpo de los consagrados. De alguna manera, viene a ocupar el lugar que dejó vacante el entrañable Clorindo Testa, la del arquitecto creativo, fuera de cualquier convención y capaz de sorprender por su informalidad. 


También sorprendió la performance de estudios no porteños, como los rosarinos Gerardo Caballero-Maite Fernández (del 7°pasaron al 4°), los cordobeses Atelman-Fourcade-Tapia (del 11° al 5°) y Dutari-Viale (sin datos en el 2013 ahora 7°) y los mendocinos Bórmida-Yanzón (del 14° al 8°). También el cordobés Miguel Ángel Roca, siempre entre los diez primeros, subió en esta encuesta del 7° al 6°, mientras que bajaron los igualmente cordobeses Gramática-Morini-Pisani-Urtubey, Arquitectonika y Vila-Solowieicyk.


En el rubro Voces emergentes y Generación intermedia, el ganador fue el estudio tucumano Plural Arquitectos que  en el 2013 figuró en el puesto 25, mientras que Adamo-Faiden conservó el 2° puesto.
Otros estudios que dieron saltos considerables fueron los rosarinos Nicolás Campodónico (del 10° al 4°) y Diego Arraigada (del 24° al 14°), los porteños Del Puerto-Sardin (del 15° al 10°) y BaBO (del 20° al 11°), y el campanense Francisco Cadau (del 16° al 6°).

Un pensamiento que se adelanta al tiempo

El arquitecto Rafael Iglesia subió tres puestos en relación a la edición 2013 y se consagró en el primer lugar. Afirma que en este momento lo que más le interesa es impulsar la recuperación de la función social de la arquitectura.
Mientras que a los arquitectos se les suele preguntar en qué proyecto están trabajando, para Rafael Iglesia -el ganador en la categoría Estudios de arquitectura del Ranking de Excelencia 2014- la pregunta más adecuada pareciera ser otra: ¿En qué cosa o cuestión está pensado? Porque “el pensar” es para Iglesia una actividad a la que dedica gran parte de su tiempo. Si bien no se considera un intelectual, confiesa que todo lo que ve, lee y le interesa lo convierte en conceptos y que estos son el germen de su producción arquitectónica.


“En este momento estoy pensando que deberíamos abocarnos a recuperar la función social de la arquitectura. Me preocupa la pérdida del espacio público. Estoy diseñando un sistema de bancos, luces y veredas anchas con árboles para que la gente vuelva a la calle. Es la mejor manera de combatir la inseguridad. Cuánto más vacía está la ciudad, más insegura es”, contó cuando lo llamamos para anunciarle que había obtenido el primer puesto. Ya programó reuniones con el municipio de su ciudad y piensa que la iniciativa tiene posibilidades de prosperar. Además agregó que la historia de la arquitectura social “hay que empezar a escribirla de vuelta” recorriendo el camino de la participación en los problemas reales de la ciudad y trabajando con sus habitantes.
Como parte de su búsqueda personal, expresiva y experimental, está trabajando en una serie de proyectos de equipamiento urbano -anfiteatro, plaza y viviendas para turistas- reutilizando silos metálicos, elementos típicos de las áreas rurales rosarinas. Y también está por comenzar un pabellón para el museo del artista mexicano Adrián Villar Rojas en Guayacán, ciudad de ese país.


Al conocer la noticia del Ranking se alegró especialmente porque sus colegas rosarinos, el Estudio Caballero-Fernández y Marcelo Villafañe también habían sido votados. Durante los primeros días de octubre, se lo vio junto a todos ellos en la Biau -Bienal Iberomanericana de Arquitectura- que se celebró en Rosario y donde Iglesia dio una charla acompañado del arquitecto cordobés Ricardo Sargiotti. Reunieron casi 2.000 personas que los aplaudieron de pie. “Es que mis conferencias son divertidas”, fue lo que acotó cuando quisimos indagar el por qué de este fenómeno.
También este año fue finalista por el edificio Altamira (con otras seis obras internacionales) al premio Mies Crown Hall AmericasPrize (Mchap), que distingue lo mejor de la arquitectura de América del Sur y del Norte. 


Si bien Iglesia se siente bien con el reconocimiento a su persona y a su trabajo, tiene claro que cuando se “apagan las luces” hay que llevarse bien con la soledad y con la realidad, que no siempre es fácil para él por los problemas de salud que soporta con entereza desde hace unos años. “Nadie es profeta en su casa”, cierra nuestra charla con la ironía que lo caracteriza.

También en el podio…
Asimismo, integró el palmarés de los más votados, el estudio Mario Roberto Alvarez + Asociados. Acostumbrados en los últimos años al primer puesto, del que fue relegado a veces por el fallecido Clorindo Testa, este año quedó en segundo lugar en el Ranking. Paradójicamente, esto ocurrió el año en que el estudio ganó una inédita exposición pública, incluso fuera del ámbito arquitectónico, gracias a su proyecto de la torre para el Polo industrial audiovisual de la Isla Demarchi, que adjudicó la constructora Riva en la competencia de propuestas. También puede contarse como hito de este año la inauguración de la gran torre de oficinas 955 Belgrano office, en el barrio porteño de Monserrat, que se caracteriza por sus muros cortina de aluminio de diferente patrón y el DVH hermético de alta prestación.
En el tercer puesto de este Ranking se ubicó el estudio Manteola/Sánchez Gómez/Santos/Solsona/Sallaberry/Vinson y Asociados, fundado por Justo Solsona -escritor, arquitecto y artista plástico con muchas décadas de trayectoria- el cual mantiene su vigencia con varias obras en curso que siguen intentando romper el molde.
Para Solsona, entre los múltiples edificios que proyectó su estudio, su preferido es “El Rulero”, (así lo llama) de la avenida Libertador y 9 de Julio, “porque llegó a convertirse en un hito de Buenos Aires”. Otras de sus dos obras más importantes en curso son  las torres residenciales Forum Alcorta y las Residencias de Alrío, en Vicente López, que se distinguen  por su voluntad de no pasar desapercibidas. “Queremos responder a las exigencias del cliente, pero también aportar una imagen nueva a la ciudad”, explica Solsona.

 

El trabajo en equipo es la clave

El estudio Plural Arquitectura, creado en el 2007, ha logrado el primer puesto de la categoría Voces emergentes en el Ranking de Excelencia 2014 de la encuesta anual de ARQ

Con un promedio de 33 años, la oficina creada hace siete años en Tucumán por Luis Ávila, Pilar Navarro, Sebastián Roldán y Gabriel Wajnerman, prioriza el trabajo en equipo.
Hoy, estos arquitectos, que se formaron en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumán (FAU-UNT), ya abrieron una oficina en Buenos Aires y cuentan con clientes internacionales.
“Buscamos sumar, aportar y encontrar la mejor respuesta posible a las necesidades de los diferentes programas. Nos orientamos hacia lo que nos moviliza, nos conmueve y nos atrae”, explican los profesionales, docentes de la cátedra Taller de arquitectura Combes de la UNT, y en el 2011 obtuvieron menciones por la Casa Zottoli y el Edificio San Juan 87 en los Premios ARQ Región NOA.
El estudio arrancó con proyectos de viviendas unifamiliares, siguió con desarrollos inmobiliarios y a partir de 2009 apostó a la participación en concursos.
“Formamos equipos de carácter internacional y realizamos proyectos para los Emiratos Árabes. Actualmente nos asociamos con los arquitectos Carlos Sarcay y Augusto Montes de Oca, para llevar adelante proyectos de distintas escalas”, señalan.
Entre los hitos del estudio, reconocen al Simposio Iberoamericano de Arquitectura (2006). “Las conferencias de Rafael Iglesia, Solano Benítez y Angelo Bucci coincidieron con el comienzo de nuestro estudio y nos sirvieron como motor. Siete años más tarde fueron seleccionados para representar y organizar el Americano del Suden Tucumán.
La construcción del edificio de la calle Congreso 228 fue su primera obra de edificio en altura y punto de partida del área de desarrollos inmobiliarios y el proyecto Viviendas de densidad media, en Tucumán, fue seleccionado en la Bienal Internacional de Arquitectura Argentina 2014. “Nuestro desafío es transformar en oportunidades las variables y condicionantes del encargo.
Creemos en la arquitectura como un gesto optimista”, definen y agregan: “Nos convocan proyectos con identidad, ideas que los respaldan y compromiso con el lugar donde se implantan. En nuestro ejercicio profesional cotidiano y en la actuación académica, creemos en generar conocimiento, transmitir y contagiar. Creemos en lo que hacemos. Nos apasiona”, dicen, optimistas.

 

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Fuentes
Cayetana Mercé y Vivian Urfeig
http://arq.clarin.com
16.12.14

 

 

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